Ciudad ecológica / Editorial
Ambato, sin duda, necesita un adecuado trabajo para mejorar su ornato ambiental, más aún en espacios, donde existe contaminación en quebradas, por el exceso de basura que se encuentra regada en laderas cerca a sitios residenciales.
Fomentar una urbe ecológica, justamente, rescata ese plan de obras, basado en buscar espacios para la siembra de árboles que son un pulmón para una ciudad que, lastimosamente, ante el gran número de automotores en calles y vías, generan una contaminación ambiental en la calidad del aire que respiramos a diario.
En buena hora, el GAD ambateño espera cristalizar, cuanto antes, el proyecto ‘Ambato Florece’, con el fin de mejorar los espacios verdes para la ciudadanía que busca opciones ecológicas y disfrutar las vacaciones. Se espera que, la Dirección de Gestión Ambiental, a través de alianzas estratégicas con el Vivero Municipal, siembre más de 200 árboles en diferentes barrios urbanos, algo positivo que apoyamos.
La Tierra de la Fruta y de las Flores como es catalogada la urbe ambateña, necesita volver a sus raíces originarias, rescatando nuestro espacio ciudadano como una ciudad jardín, volviendo a tener un cuidado ambiental mayor, acorde a la infraestructura ecológica de nuestro terruño. (O)