Domingo en casa / Editorial

Editorial

Desde hace varios meses el domingo hay toque de queda total en el Ecuador, es decir, está prohibido moverse fuera de los límites del hogar. La medida de encierro total, al igual que las otras que ha establecido el COE Nacional, ha sido adoptada en el marco de la propagación del COVID-19.

La medida adoptada restringe varios derechos constitucionales, específicamente, la libertad de tránsito. Una medida que restringe un derecho, como es el caso de la prohibición de salir el domingo, debe cumplir ciertos requisitos.

Es indispensable que la restricción persiga un fin legítimo, que en el presente caso se cumple, ya que precautelar la salud de los ecuatorianos es, indudablemente, una limitación legitima. El problema surge cuando nos preguntamos si es necesaria, idónea y proporcional.

Es discutible que la restricción total de movilidad el domingo ayude a bajar la cantidad de contagios de COVID-19. Por el otro lado, afecta severamente a familias que tienen que desplazarse a cuidar a sus mayores, a comprar alimentos u otras actividades indispensables.

A pesar de ser una medida, a criterio de algunos, irracional, hay que cumplirla por haber sido ordenada por la autoridad competente. Por lo pronto habrá que adaptarse a pasar los domingos en la casa y esperemos que pronto se levante la medida. (O)

Deja una respuesta