Miedo / Editorial
El primer lugar obtenido en la primera vuelta electoral por el ministro-candidato oficialista Sergio Massa en Argentina con el 36 por ciento de los votos, sobre el liberal Javier Milei y la moderada Patricia Bullrich, dejan algunas lecciones.
Para el ciudadano común pesa más el miedo a perder las ayudas económicas en subsidios al transporte, a los combustibles a los servicios básicos, que los temas de política económica, seguridad y corrupción.
La mayoría de los votos lo ha conseguido el Ministro de Economía de Argentina del gobierno kirchnerista, que en su gestión ha hundido la economía a Argentina con niveles de inflación solo comparables en la región con Venezuela o Haití, que ha pulverizado el valor de la moneda nacional frente al dólar; que, además, representa a un gobierno cuya vicepresidenta tiene en suspenso una sentencia por corrupción y atraco a las arcas fiscales, cuyas autoridades no dudan en exponerse en yates y viajes de lujo con dineros opacos.
Al ministro-candidato le funcionó a la perfección la estrategia de entregar millones de pesos devaluados a la población más necesitada, que obviamente lo recibe con agradecimiento, sin comprender que con esta política de bonos en un futuro muy cercano solo se agravará la hiper inflación que sufre la economía de Argentina.
El candidato Milei, tiene poco menos de treinta días para el balotaje y moderar su discurso, que asustó a buena parte de los electores, por temas espinosos como las relaciones con el Vaticano, la venta de órganos humanos, temas de paternidad, así como para aclarar sus propuestas económicas disruptivas como la dolarización de la economía y la eliminación del Banco Central. (O)