El sambo, producto infaltable en la mesa de los abuelos

Lo toma entre sus manos y con nostalgia  recuerda que en su casa nunca faltaba algún bocadito elaborado con el sambo. María Teresa Cunalata tiene 56 años de edad y es una de las que promueve que no se pierda el cultivo de este fruto, producto que es considerado Patrimonio Alimentario del Ecuador.

María Teresa viaja en sus recuerdos hasta el tiempo en que sus abuelos sembraban el producto y lo cosechaban desde muy tierno hasta cuando estaban maduros. “Con los tiernos hacían ensaladas, sopas y la fanesca. Los que tienen la comida dura se los utiliza para los dulces o los rellenos de las empanadas, son deliciosos solo que muchas personas no lo saben preparar”, asegura la agricultora  que es parte de la ‘Asociación Compartiendo Esperanzas’ y que laboran en la Plaza 12 de Noviembre en Pelileo, cantón de Tungurahua.

Es ahí en la plaza donde ofertan todos los productos cultivados de forma agroecológica para ser bondadosas con la madre tierra, dice la mujer.

Norma Violeta Rodríguez es otra de las integrantes de la agrupación de agricultores, habita en Sigualó Alto que está a cinco minutos de Pelileo, asegura que en la comunidad promueven el cultivo y el consumo del alimento ancestral.

Los comerciantes que promueven la agricultura limpia son más de 80. Norma Violeta Rodríguez cuenta que  los cultivos  solo lo mantienen con abonos orgánicos que permite proteger a la pachamama y también  les ofrece un alimento más sano.

Norma Violeta Rodríguez mencionó que tratan de innovar en las formas de preparación del fruto, con productos ancestrales pero más llamativo al paladar de los comensales. Menciona que en los hogares se pierde esa costumbre de prepararlo. Dice que antes les daban dulces de sambo como golosina, además de nutritivo era económico. (I)