El último juego
La parroquia San José de Poaló-Píllaro se ha teñido de dolor, cuando una tragedia inesperada golpeó a una familia. El sol ya empezaba a caer sobre el sector de Huagragasi cuando una mujer de 30 años de edad, realizaba sus labores domésticas mientras jugaba con sus tres hijos. Sin embargo, un descuido momentáneo desencadenó un episodio que cambiaría la vida de todos en el hogar.
Su hijo menors, de apenas un año y 11 meses, desapareció de la vista de su madre en un instante. Al notar su ausencia, la mujer corrió al exterior y preguntó a sus vecinos si lo habían visto, pero no había rastro del pequeño. Desesperada, la búsqueda se extiende por los alrededores del hogar. El temor crecía con cada segundo que pasaba, hasta que lo inevitable ocurrió: el niño fue hallado flotando en el tanque de agua, su pequeño cuerpo inmóvil.
La escena, devastadora para cualquier madre, no dejó lugar para el miedo. En un intento desesperado por salvar a su hijo, la mujer, acompañada de su cuñada, trasladó al niño en un vehículo particular hasta una clínica en Píllaro. Sin embargo, la tragedia ya estaba consumada. El médico confirmó lo que ella tanto temía: el bebé ya no tenía signos vitales. (I)