El último suspiro de un universitario
La noticia de la partida de un joven de tan solo 22 años de edad, cayó como un balde de agua fría en una vivienda ubicada en la calle Cueva Celi y Bustamante Toro, al Sur de Ambato, la tarde del lunes 12 de agosto.
El hecho se propagó rápidamente por el vecindario, dejando a familiares, amigos y conocidos conmocionados y desconsolados. El sol aún brillaba en el exterior, pero en el interior de esa casa, una sombra de tristeza se cernía sobre todos.
Según el relato de un tío, el joven había salido por la mañana rumbo a la universidad, como cualquier otro día. Sin embargo, las horas pasaron y la preocupación se apoderó de su familia. Tras una intensa búsqueda, el peor de los presagios se confirmó al encontrarlo sin vida.
La imagen de un joven con toda una vida por delante, quedará grabada en la memoria de quienes lo conocieron. Vecinos y amigos lo describen como una persona alegre, amable y con un futuro prometedor. Su partida prematura ha dejado un vacío irreparable en sus corazones. (I)
