Estaremos atentos al cumplimiento de ofrecimientos
“Queremos la máxima pena para el asesino” fue la frase que se escuchó durante el recorrido de la marcha ejecutada por los taxistas de la ciudad y provincia, ayer.
Los reclamos de justicia fueron evidentes en el recorrido. Los taxistas y familiares del conductor fallecido en manos de un delincuente, encabezaron la marcha que salió desde la Unidad Nacional hasta llegar a las instalaciones de la Gobernación de Tungurahua.
La indignación se reflejaba en el rostro de cada conductor. “Nosotros no queremos más muertes, ni asaltos. Somos personas vulnerables frente a la delincuencia. Pedimos que este problema no se haga político, ya es hora que los asambleístas hagan algo por nuestra provincia”, dijo Miguel Sandoval, conductor.
El presidente de la Unión Provincial de Taxis, Giovanny Sánchez, entregó un petitorio a las autoridades provinciales, quienes acogieron y se comprometieron en ayudar, para ser entes activos de seguridad defendiendo a la clase ‘amarilla’.
Giovanni Alarcón, hijo del occiso, agradeció a los más de tres mil asistentes que participaron en el encuentro ciudadano.
El abogado defensor de la familia Alarcón, Luis Criollo, manifestó que el petitorio se enfoca en el pedido de restricción de ingreso de turistas a este país y sobre todo a la provincia. “La gente que quiere hacer daño debe ser excluida. Necesitamos un filtro a través de la Ley de Migración”, contó.
Finalmente el gobernador de Tungurahua, Juan DeHowitt, emitió su mensaje de condolencia a la familia del taxista asesinado. “Quiero expresar mi sentir a los deudos y que sepan que no les vamos a dejar solos. Se va hacer justicia, pediremos la máxima pena para el causante del atroz acto de violencia”, puntualizó.
Los conductores aseguraron estar pendientes ante las decisiones de la justicia frente al juzgamiento del implicado en el asesinato. (I)