Estigma Social y Salud Mental/ Psicóloga Clínica Alejandra Sánchez
El estigma social es un tema de gran importancia en la psicología social debido al impacto que tiene en la vida de las personas. El estigma puede ser definido como la etiqueta negativa asociada a un individuo o grupo debido a características consideradas anormales, indeseables o diferentes de las normas sociales predominantes. Este puede surgir por una variedad de razones, como la raza, religión, orientación sexual, discapacidad o apariencia, y puede tener un impacto significativo en la salud mental, emocional y física de las personas.
La psicóloga Brenda Major realizó en 2012 un experimento para determinar cómo las personas son afectadas por el estigma y cómo este afecta su comportamiento y bienestar. En el estudio, se observó cómo el estigma asociado con la obesidad afectaba a los participantes, que fueron asignados aleatoriamente a uno de dos grupos: un grupo de estigma y un grupo neutral.
Los resultados del experimento mostraron que los participantes del grupo estigmatizado experimentaron un aumento significativo en la ansiedad y el estrés, y una disminución en su autoestima en comparación con los participantes del grupo neutral. Además, se encontró que el estigma puede tener efectos adversos en la salud física de las personas, ya que aquellos que experimentaron el estigma de la obesidad también mostraron aumentos significativos en la presión arterial y la frecuencia cardíaca en un estudio de seguimiento.
Es importante destacar que los resultados del experimento resaltan la importancia de abordar el estigma social en nuestra sociedad ya que puede tener efectos negativos significativos en la salud física y mental. Por lo tanto, debemos ser conscientes de cómo nuestras palabras y acciones afectan a los demás, es esencial trabajar para reducir el estigma y promover una mejor comprensión y aceptación de las diferencias individuales. Los experimentos sugieren que debemos respetar y empatizar con todos, así mismo, seguir trabajando como sociedad para reducir el estigma y promover una mayor comprensión y aceptación de las diferencias individuales, lo que puede conducir a una sociedad más inclusiva y equitativa.