Estimular la innovación / John Tello Jara

Columnistas, Opinión

 

El techo de utilidades del 15% que reciben los trabajadores, según el Acuerdo Ministerial No 093 se ubicó en un tope de 24 salarios básicos, es decir que podían recibir máximo USD 9.264,00 (considerando para el ejercicio 2018 un salario de USD 386,00), el excedente debía financiar el seguro para las amas de casa.

Considero que al igual que muchos ecuatorianos, estamos de acuerdo en financiar la seguridad de todos, que bueno sería que podamos ocupar con mucha satisfacción los servicios de seguridad social (citas médicas, medicina, préstamos quirografarios, hipotecarios, etc.) pero en la práctica vemos que no contamos con la estructura adecuada para cumplir dicho cometido.

Analicemos este particular desde la óptica del emprendimiento para juntos obtener conclusiones; supongamos que nuestros hijos ya son “grandecitos” y han obtenido un título académico (para lo cual usted realizó un crédito, vendió un terreno, utilizó un fondo de inversiones). Su hijo ya con un título en mano, con la energía y el entusiasmo que deriva los conocimientos adquiridos y para demostrar a la sociedad su valía, inicia su vida empresarial, montando una unidad productiva, para lo cual contrata personal, adquiere maquinaria, compra materia prima, se tecnifica continuamente para abaratar costos, acude a seminarios nacionales e internacionales, en fin, a base de esfuerzo propio y de sus colaboradores logra posicionar a su negocio.

Llega el momento de disfrutar la inversión realizada por sus padres, por el riesgo que tuvo cuando inicio las actividades, por el sacrificio en su preparación;  pero se da cuenta que, de su negocio, tan solo puede repartir a sus trabajadores un tope de 24 salarios básicos de las utilidades generadas y que la diferencia se irá a un fondo, que sin duda alguna va a ser administrado por un gobierno que dejó endeudado al país en USD 70 mmdd y cuyos actos  realizados de manera indebida (ODEBRECHT, empresas estatales con pérdidas, entes cuestionados) causa mucha molestia y, lo que es peor, me pregunto si de esa manera se puede “estimular” la creatividad, la invención y el desarrollo de un país? Por suerte solo está quedando “malos recuerdos” de una época en la cual se tomaban decisiones sin el análisis de lo que significa emprendimiento. (O)

 

 

 

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