Faenamiento se redujo un 70%
Las consecuencias de la pandemia, paralizaciones e informalidad ha provocado que el faenamiento en el camal municipal de Ambato se reduzca en un 70%, informó la jefe de este espacio, Sonnia Chicaiza.
Esto significa que solo el 30% de la capacidad del camal está operativa, lo cual preocupa.
Frente a ello, viene coordinando acciones con ‘Agrocalidad’ para intensificar los operativos de control que impidan por ejemplo la venta de cárnicos en las calles.
Ciertas comerciantes han decidido evitar estos chequeos y más bien expenden las carnes en la vía pública sin ninguna garantía sanitaria.
Ante esta realidad, sugirió a la población para que tome precauciones y no adquiera alimentos sin ningún tipo de revisión, ya que está de por medio la salud.
Ha observado que camiones se estacionan en cualquier parte de la ciudad para vender cárnicos, por lo cual insistió en que no compren esos productos que podrían estar contaminados y transmitir determinadas enfermedades. (I)