Funerales, entre el sufrimiento y gastos
El Registro Civil de enero a junio notificó 1.825 defunciones en el presente año; y, 1.387 en el 2019; en julio hasta el 21, registró 376; junio es el mes con mayor número de funciones 473. (Foto El Heraldo)
La muerte, el dolor y sufrimiento están presentes en la humanidad y no es solo problema médico, su concepto está relacionado con los aspectos sociales y culturales. La pandemia ha profundizado los estigmas de amargura en la vida humana e incluso con sepelios privativos de trascendencia, respeto al cuerpo y agobios que hacen imposible pensar con claridad los costos de los funerales.
Las prestaciones exequiales registraron cambios después del 11 de marzo, día de la declaración de la pandemia. El mercado respectivo inicialmente se vio reducido a las funerarias con servicio de cremación debido a las normas de seguridad emitidas por la Organización Mundial de la Salud (OMS); posteriormente, las disposiciones cambiaron y automáticamente el resto de compañías comenzaron a laborar.
Las inhumaciones con sentido de trascendencia desde el abrazo cálido de la condolencia hasta el acompañamiento masivo al campo santo quedaron en el recuerdo, por el momento; pero los gastos funerales son permanentes e inevitables y con varios detalles a revisar. (I)
