Importancia del ética en la vida y en los negocios
La ética, ese conjunto de principios morales que guían el comportamiento humano y
organizacional, son esenciales para construir una sociedad justa y equitativa, y su
relevancia se extiende tanto a la vida personal como al ámbito empresarial.
La ética actúa como un faro que orienta nuestras acciones y nos ayuda a distinguir
entre lo correcto y lo incorrecto, proporcionando una base para vivir de manera
coherente con nuestros valores y creencias.
En los negocios, hay empresarios que ponen por encima de la ética y los valores, los
resultados financieros, sin darse cuenta que la ética corporativa puede ser una fuente
de ventajas competitivas, ya que por medio de ella se pueden atraer clientes y buen
personal.
A través de la ética se puede acabar con prácticas corruptas que destruyen valores,
dañan la economía y perjudican la sociedad. Si nos basamos en el factor humano, valoremos más a las personas cuyos ejemplos de comportamiento son un ideal para todos. Estamos viviendo tiempos de globalización que han hecho organizaciones más planas, muy descentralizadas, con empleados cada vez más autónomos y con mayor poder de decisión.
Por ello se hace necesario que las relaciones no solo al interior de las empresas y
demás organizaciones, se basen en valores básicos como: igualdad, libertad, diálogo,
respeto y solidaridad.
La ética suele mejorar el funcionamiento de la empresa mediante varias vías: reduce
los conflictos de los miembros que la forman, mejora su imagen exterior, supone un
componente esencial del concepto de “Calidad Total”, tan solicitado hoy en día.
Evidentemente que un comportamiento empresarial ético no es la panacea para todos
los problemas, ni conduce cien por ciento al crecimiento y la prosperidad de la
empresa, pero un comportamiento antiético, aunque parezca paradójico, tampoco.
Hay que olvidar el hecho de enfocarse demasiado en los resultados, es sustancial dar
mayor importancia a los procesos que son los que finalmente permiten alcanzar los
resultados deseados.
La ética es un pilar fundamental tanto en la vida personal como en los negocios. En el
ámbito personal, nos guía en nuestras acciones, promoviendo la confianza, el respeto y
la integridad. En el mundo empresarial, la ética es crucial para construir una
reputación sólida, fomentar la lealtad del cliente, y establecer relaciones sostenibles y
de largo plazo. Al adoptar prácticas éticas, tanto individuos como empresas
contribuyen al bienestar general y a la construcción de una sociedad más justa y
equitativa. (O)