Inseguridad por motines
Quienes habitan cerca de las cárceles aseguran que tienen temor por las fugas o los motines que se realizan en su interior. La cárcel de Ambato se ubica en la avenida El Cóndor y Real Audiencia, cerca están diferentes barrios e incluso el Mercado Mayorista y América. José Caiza, comerciante, mencionó que al ser una cárcel más pequeña no se han dado grandes amotinamientos ni matanzas como las ocurridas en otras provincias del país, incluso en Latacunga; aseguró que si temen cuando se dan las fugas porque pueden ingresar a las casas aledañas.
En cambio, Ernesto López, habitante del barrio La Universal, sostuvo que el temor no solo es estar cerca de la cárcel de la ciudad, sino el ser vecinos de Latacunga, se dan las grandes matanzas y fugas. “Los delincuentes pueden fugarse a nuestra provincia, porque es de fácil acceso”, sostuvo.
Para el prefecto de Cotopaxi, Jorge Guamán, se viven tiempos complicados con la crisis carcelaria. “Cuando nos construyeron la cárcel dijeron que era la más segura y moderna, pero pasado el tiempo nos damos cuenta que no fue así. Sabíamos que era mentira y ahora quienes habitan en las zonas aledañas son quienes no pueden vivir tranquilos. No hay garantías de seguridad y el Estado debe trabajar en un verdadero sistema de rehabilitación”, expresó el prefecto.
El prefecto de Tungurahua, Manuel Caizabanda, también hizo el llamado a reestructurar el sistema penitenciario. Entre los problemas que aqueja a las cárceles, es la sobrepoblación, incluida la de Ambato.
De acuerdo a un informe de la SNAI, en 13 años se triplicó la población penitenciaria en el Ecuador: de 13.125 internos en 2008 a 38.693 en febrero de 2021. Los detenidos están distribuidos en 37 centros para adultos y 11 de adolescentes infractores. En Ambato existe más de 600 y la capacidad es 400.
En todos los centros hay cabida para 29.897 PPL, existe hacinamiento del 29,42 %. Tampoco existe el suficiente personal de guardianía. La norma internacional señala que, por cada 10 presos, debería existir un agente. En Ecuador, por cada 26 privados de libertad hay un agente. La SNAI confirmó que existe un déficit de aproximadamente 2.530 guías penitenciarios. (I)