La clase media va desapareciendo /Juan Diego Valdivieso Rowland
Lunes 15 de junio, 10 de la mañana. En el centro de Ambato hay mucho movimiento en las calles, donde transeúntes, comerciantes, empleados y también muchos mendigos, comparten los espacios públicos. Este panorama se repite en algunas zonas de la ciudad, donde muchas personas piden caridad en los semáforos. También se observa a muchas familias extranjeras que recurren a la mendicidad para sobrevivir.
Sin embargo, esto es el reflejo de una situación que sucede con miles de ecuatorianos que gracias al confinamiento han perdido sus empleos y sus ingresos. Así lo refleja un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), publicado el 5 de junio en el que señala que el Covid-19 aumentará la pobreza y deteriorará a la clase media en los países andinos.
En Ecuador, después de tomar en cuenta el apoyo monetario para mitigar los efectos de la pandemia, la pobreza afectará a casi 34 hogares de cada 100. Hasta diciembre de 2019, 23 de cada 100 familias estaban en esa situación, según información recabada por Mónica Orozco, en Diario El Comercio.
Antes de marzo de 2020, 72% de los ecuatorianos pertenecía a la clase media. Parte de ese porcentaje no contaba con contrato laboral o tenía uno temporal, lo que hacía más precaria su situación. Hubo un auge de la clase media, pero faltaron políticas y medidas para consolidarla y evitar que caigan en la pobreza, como sucede actualmente. En cambio, la clase media consolidada, donde el trabajo precario es menor, caería del 27,7 al 24,5%.
Respecto al desempleo, las cifras no son alentadoras. La Población Económicamente Activa (PEA) del Ecuador bordea los 8 millones de personas, de las cuales 5 millones ya se encontraban en subempleo o desempleo antes de la pandemia. Durante la cuarentena, 250 000 personas ya han perdido sus empleos. El Gobierno prevé que la cifra suba en medio millón hasta finales de 2020, llegando a las 5.5 millones de personas. Según el Banco Central, el Producto Interno Bruto (PIB), caería hasta un 9,6%.
Será dura la recuperación, pero es tarea de todos hacerla posible. (O)