La salud y la vida es lo primero / Hernán Marcelo Guerrero
Es impresionante como los casos suben, una cantidad inimaginable cada día. Esto se debe en gran parte por la desobediencia e insensatez de las personas. Lamentablemente, vivimos en una sociedad que necesita castigos y consecuencias negativas para obedecer. Actualmente a pesar de las sanciones mencionadas por el Estado. Muchas personas no son conscientes de que las disposiciones establecidas son por nuestro bien y de nuestro entorno.
Estamos siendo testigos de como las 10 primeras economías y más grandes del mundo han caído una tras otra de rodillas frente a este enemigo, dígase lo que se diga ningún país tenia los recursos humanos y técnicos listos para cuando llegue el virus. De otro lado a nadie se le pudo pasar por la cabeza las consecuencias que está dejando esta pandemia: negocios cerrados, fabricas paralizadas y un desempleo creciente, y es que el virus tomó de sorpresa al mundo. Es una tragedia mundial y hay que trasladarla como tal y se requiere ingentes recursos económicos para su solución. Los países desarrollados los tienen y ya han tomado medidas. Por nuestra parte, primero tenemos que encontrar los fondos para que a nuestros médicos no les falte nada y sigan salvando vidas. Para ello se debe recortar gran parte del presupuesto que se destinaron a otras áreas, y vayan en atención de la salud.
Pero al mismo tiempo que se atienden los problemas de la salud, hay que ver las consecuencias de esta guerra contra el COVID-19, así como se están viendo en otras partes, los negocios de todo tipo, cerrados traerán quiebras y desempleo, algunas personas saldrán bien libradas del virus, pero quienes quiebren sus negocios y otros no tengan empleo, podrían morirse de hambre, algo debe hacerse orientadas a mantener la producción para que el impacto en el empleo sea el menor posible. Por tanto las autoridades gubernamentales y seccionales tienen el desafío imperante para dedicarse a tres cosas: defender la salud, la producción y el empleo.