La sobreproducción motiva un cambio de timón / John Tello Jara
Los productos alimenticios al igual que la ropa, pasan por etapas “de moda” con su propia característica; por ejemplo, un vestido que utiliza una artista en Hollywood, se vuelve tendencia, pudiendo ser “copiado” y mientras menor es la producción, las personas podrán exhibirlas como “únicas” en el mercado y sentirse muy seguras de sí mismo.
Pero cuando hablamos de productos alimenticios, también pasamos “modas en su producción”, recuerdo que tiempo atrás estuvo de moda la producción de tomate de carne bajo la modalidad de invernadero, muchos productores al conocer esta nueva técnica productiva, optaron por solicitar a las entidades bancarias, préstamos e implementar este negocio, que indudablemente es rentable siempre y cuando no existan muchos oferentes; pero nunca contemplaron una sobre oferta de producción, lo cual motivó una reducción del precio del producto.
Pero qué hacer cuando tengo conocimientos de un solo producto y veo que su precio tiende a la baja?, pues inmediatamente debo dirigirme a otro producto, para aprovechar el suelo del cual dispongo. En este contexto una alternativa que me llama la atención es la “tuna” por sus características, alto contenido de vitamina C (que evita resfríos), es baja en calorías y grasas lo cual favorece a personas que desean bajar de peso, reduce el colesterol y los triglicéridos, previene la indigestión por la cantidad de fibra que posee, además que previene el envejecimiento, contribuye a la salud de los huesos por su contenido en calcio y magnesio y mejora la acción plaquetaria encargada de la coagulación de la sangre, permitiendo la cicatrización de alguna herida.
La demanda mundial se centra en países como México, Italia, España y sudáfrica, con una producción mundial de 400.000 toneladas (1998), el rendimiento varía ya que va de 4 toneladas por hectárea hasta las 45, dependiendo las técnicas de manejo y los diseños de cultivo implementado en cada lugar.
Mercado interno para la venta de la tuna si la tenemos, pero falta conocimiento de las bondades y su presentación, recordemos que a veces la presentación de un producto no puede ser tan agradable, por lo que debemos ser creativos para llegar al consumidor de diferentes formas. (O)