La voz de los transportistas y sus familias 

Columnistas, Opinión

La muerte de Derlis de la Cruz, un niño inocente de apenas 10 años que acompañaba a su padre en sus labores de transportista ha conmocionado al país y al gremio de transportistas. Es inaceptable que la violencia y la inseguridad sigan cobrando vidas inocentes en Ecuador. 

La protesta que se llevó a cabo el 29 de agosto en el Obelisco de Alóag, es un claro ejemplo de la capacidad de movilización y organización de los transportistas, quienes no dudan en hacer oír su voz cuando consideran que sus derechos están siendo vulnerados.

Es hora de que las autoridades tomen medidas concretas para garantizar la seguridad de todos los ciudadanos, especialmente de los niños. Además de tomar medidas urgentes para proteger a los transportistas y sus familias. 

Este hecho sucede dos meses después de la advertencia de los transportistas, quienes advirtieron de un apagado de motores para exigir seguridad en las vías del país. Sin embargo, la medida fue retirada días después con el fin de analizar acciones y buscar soluciones más efectivas para abordar la problemática de la seguridad en el sector transporte.

Según la Cámara Ecuatoriana de Transportes Pesados (Cetrape), entre 2023 y mayo de 2024, se han registrado 240 transportistas víctimas de secuestro, robo y asesinato. Cuánto tiempo más tendremos que esperar para mejorar la seguridad en nuestro país. (O)

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