Largo feriado se aproxima / John Tello Jara
Apoyar al turismo, uno de los sectores más golpeados por el COVID-19, parece ser una tónica que compartimos todos los ecuatorianos, con el objeto de dinamizar la economía con todas las actividades indirectas que esto conlleva.
En efecto al movilizarse una persona junto a su familia, se requiere de transporte, aun cuando el viaje sea corto, para eso se consume combustible con el correspondiente desgaste de neumáticos, motor, aceites, filtros, etc. luego se llega a un restaurante y el pedido registra desayuno continental, americano o básico, con la consecuente demanda de pan (harina, mantequilla, queso), huevos, jugos (frutas variadas) y no se diga al llegar al almuerzo, donde sus componentes se incrementan más.
Las ciudades a ser visitadas tienen eventos diversos, eso permite contratar, grupos musicales, comparsas, cuentan con escenarios pictóricos, quintas históricas, casas coloniales, ingreso al mar, piscina, sauna, etc.
Llegada la noche, necesitamos sitios de alojamiento, hoteles, residenciales, garajes para los vehículos y por supuesto los recuerdos en las ferias exposiciones que se llevan a cabo en diversos horarios hacen el deleite de grandes y chicos en días de regocijo.
El promedio que un turista gasta por día es USD 60,00 a USD 80,00 y la cantidad de visitantes que se pretendería alcanzar llega a 600.000 personas.
Cada ciudad debe prepararse formando alianzas entre la empresa privada y los GAD´s, para mostrar sus bondades, recordemos que ninguna fiesta tiene el monopolio de las visitas y que depende de la creatividad y el buen trato al turismo para poder calar en la visita de los turistas. (O)