Las gradas eléctricas municipals / Editorial
Está en marcha la construcción de las gradas eléctricas desde la calle 13 de Abril hasta la parte alta donde está la Iglesia de los Padres Josefinos.
El costo de la obra supera el millón de dólares. La decisión de construirla no gozó de un amplio consenso ciudadano.
La obra es interesante, aunque no se conocen los detalles de la operación y mantenimiento de las gradas eléctricas.
Existe el riesgo que suceda lo que ha ocurrido con los centenares de bicicletas municipales embodegadas. Es decir, que el dinero invertido no cumpla la finalidad para la que se lo empleó, dejando de ejecutar otras obras y proyectos.
No porque sean obras las que construye el Municipio, la ciudad recibe un beneficio directo. Se debe medir el costo de la operación del proyecto y su utilidad social.
Esperamos que las gradas eléctricas sean útiles para mejorar el entorno urbano del sector y ayudar a la movilidad. Si no cumplen estos propósitos, resultarán un monumento al despilfarro. (O)