Las mujeres siguen en la lucha laboral
Las mujeres se incorporan en la economía familiar; la pandemia ha generado nuevos retos y responsabilidades. (Foto El Heraldo)
El Instituto Nacional de Estadística y Censo (INEC) reveló la información de la Encuesta Nacional de Empleo, Desempleo y Subempleo (Enemdu). Los datos inciden en la población femenina.
El Enemdu determina la clasificación de la Población Económicamente Activa (PEA) en empleo (adecuado, subempleo, otro empleo pleno, no remunerado, no clasificado) y desempleo (abierto y oculto).
Uno de los aspectos revisados es el subempleo. En diciembre del 2020, la tasa se ubicó en el 24,5 por ciento para hombres y el 20,1 para mujeres. Está identificado por la insuficiencia de tiempo de trabajo y por insuficiencia de ingresos; mientras que, el desempleo se ubicó en el 6,7 por ciento para mujeres y el 3,7 por ciento para los hombres.
“La crisis laboral en el Ecuador antes de la pandemia, ya venía arrastrando graves consecuencias en la economía del país y esta evidentemente se agravó con la presencia de la Covid-19, teniendo sin lugar a dudas dura repercusión en las mujeres; pues, la carga laboral por teletrabajo, cuidados de sus hijos y/o de adultos mayores, educación virtual y oficios de la casa se convirtieron en horas interminables de un diario, arduo y agotador trabajo”, expresa María Gracia Mayorga, comunicadora social.
“En el Ecuador, las mujeres aún debemos enfrentar inmensas brechas laborales. Los hombres aún siguen ganando más que las mujeres y tienen menos horas laborales, algo que se agudizó más con la pandemia; pues, muchas mujeres se vieron ‘obligadas’ a renunciar a sus trabajos para cuidar a sus hijos y hacerse cargo de las tareas del hogar sin ninguna compensación económica que reconozca este trabajo, que dicho sea de paso es muy sacrificado, de domingo a domingo, desvalorizado y llevado a menos”. Considera importante “reconocer el trabajo de la mujer en la actualidad; pues, las responsabilidades que asumimos son de alto valor y sus resultados son generalmente exitosos”.
A decir de la profesional de Derecho, Ivonne Cárdenas, “la situación laboral de la mujer en la actualidad se ha visto en un total emprendimiento, autonomía e independencia, porque en los momentos más críticos de la misma de la pandemia tomó en sus hombros al hogar y la mujer triplicó su rol, porque ya no sólo fue madre, esposa, pasó a un rol de jefa de hogar para proveer cada alimento con distintos medios laborales, y no precisamente en sueldos, se convirtió en economista para que alcance cada ración, se convirtió en chef, comerciante, transportista, entre otros”.
La mujer también emprendió y acudió a la costura, comercio, creó nuevas modalidades de trabajo. Y llegó a determinar en algo, que no todo es un sueldo y la dependencia laboral, se abrió a la autonomía e independencia financiera. (I)
