¿Lavado o Pirámide? / Edison Narváez Z.
La intermediación financiera, es decir la captación y colocación de dinero, lo realizan las instituciones financieras legalmente autorizadas y controladas por la Superintendencia de Bancos que controlan a los Bancos Privados y Públicos, y la Superintendencia de Economía Solidaria que controla a las Cooperativas de Ahorro y Crédito. Por tanto, la captación ilegal de dinero es un delito tipificado en el Código Orgánico Integral Penal y es sancionado hasta con siete años de prisión.
Sin embargo, “Por la plata baila el mono” decía mi abuelita; de hecho, en este inerme país sucede de todo a vista y paciencia de la colectividad, que calla y secunda lo que sea cuando se trata de ganar dinero.
Lo sucedido en Quevedo y en nuestra inerme ciudad, es una respuesta a las condiciones socio económicas de la gente y a la desesperación por generar ingresos; que conjuntamente con la distorsión de los valores hacen que la gente se vuelva oportunista y aproveche la oferta ilegal de empresarios facinerosos para ganar dinero fácilmente, sin saber de dónde viene ese dinero. Terminan estafando a la gente
Evidentemente, el problema se origina en dos realidades: La fragilidad de los sistemas de control; la ignorancia y oportunismo del pueblo para creer en soluciones prodigiosas que prometen sacarlo de la pobreza.
La explicación se cae de madura, se trata de lavado o de una estructura piramidal. De donde esta gente puede obtener un capital tan grande como para ofrecer un interés impensable a los incautos. Si el tema es Lavado de Dinero, entonces hay mucha tela que cortar para indagar en donde se origina el capital inicial. Si se trata de un Sistema Piramidal entonces los de la base de la pirámide es decir quienes ingresan recientemente, sostienen a los de arriba que reciben los pagos; el problema es cuando se reduce o se paraliza el ingreso de nuevos incautos, se debilita la base de la pirámide y se provocan los perjuicios para quienes no alcanzan a retirar su dinero. De todas maneras, es necesario destacar que el enriquecimiento ilícito también es penado con cárcel.
La pregunta es de donde proviene el dinero de los incautos, claro está que no es de los ahorros depositados en el sistema financiero, porque los depósitos de bancos y cooperativas han tenido un evidente ascenso en este último año; evidentemente provienen de una liquidez transitoria de la gente es decir de la venta de bienes, de anticipos por trabajos contratados, o de préstamos obtenidos en las instituciones financieras. Sin duda hay que ser más exigentes en el control de estos “pseudo empresarios” y más exigentes en la educación financiera. (O)