Los Subsidios / Editorial
El tema económico es la principal preocupación del gobierno por el elevado déficilt fiscal que arrastra heredado del gobierno anterior y que alcanza cifras que bordean los ocho mil millones de dólares.
Entre los varios subsidios que mantiene el gobierno, los que más se destacan están las gasolinas, el diesel y el gas, que son de consumo de todos los ecuatorianos, sin distinción alguna. Los sectores populares son los más afectados, sea por el consumo masivo de gas, sea por el transporte público, sea por los precios de los productos alimenticios.
Este tema es muy delicado y tiene sus incidencias políticas, por ello, los gobiernos tienen recelo de tratarlos y peor aún, disponer el aumento de precio de los combustibles. Existen antecedentes que explican esta prudente actitud.
No obstante, se debe encontrar la solución adecuada para no afectar a las clases populares y para controlar el déficit fiscal, que impide mejorar la economía del país en beneficio de los ecuatorianos. Los técnicos en la materia deben analizar toda la complejidad del problema y evaluar las sugerencias expuestas a la consideración pública.
Por qué no intentar el aumento al bono, que recibe la gente pobre, el valor del cilindro del gas a precio real; por qué no entregar solo a los transportistas públicos una tarjeta para que consuman el diesel al precio actual. Parece llegada la hora de evitar la injusticia existente. Sería la mejor opción diferenciada para que el subsidio llegue a quien debe favorecer de verdad. (O)