Madrugada de terror en el norte
Pablo (nombre protegido) es una de los dos comuneros del sector El Pisque que la madrugada de ayer se salvó de la mano de los manifestantes agresivos. A eso de la 01:30 horas escucharon gritos y alertas y cuando salieron a observar, ya que pensaron que estaba ingresando a las casas, recibieron golpes con piedras y con machetes. “Era una verdadera guerra, porque los manifestantes empezaron a impedir el paso a los vehículos que estaban circulando con productos alimenticios a Quito y los policías por dispersar utilizaron bombas lacrimógenas. Cuando estuvimos en la calle para proteger nuestras casas, un grupo de los que bloquean las vías nos agredieron con mi hermano y algunos gritaban que nos iban a matar”, contó Pablo, aún atemorizado por la ola de violencia en esta paralización cuyos movimientos pregonan que es pacífica.
Pablo pensó que iba a morir. Un sujeto le estampó un golpe fuerte con el costado del machete. “Si me daba con el filo me cortada en dos”, relató el agredido quien aseguró que por El Pisque ya no pueden dormir ni estar en paz, desde hace quince días que empezaron a bloquear el ingreso al Parque Industrial.
A las 09:00 horas de ayer, manifestantes se enfrentaron con habitantes del sector quienes se opusieron a cerrar sus negocios
El jefe de la Zona Tres, coronel Juan Carlos Salazar, expresó que han recibido varios ataques por el sector de la Panamericana Norte cuando custodiaban varios convoyes, con alimentos y productos avícolas por comuneros que están cerrando las vías.
“El ataque se dio con palos y piedras, dañaron varios patrulleros y a los camiones que llevaban alimentos. Es necesario que pongan la denuncia correspondiente los representantes de las cámaras de producción y nosotros como policías seguiremos con las investigaciones”, manifestó el coronel. (I)