Moisés Sánchez y Sánchez (1912 – 1977) / Pedro Reino Garcés

Columnistas, Opinión


¿Recuerdan que en Ambato existió la escuela nocturna “Juan Cajas”?  El profesor Moisés Sánchez  fue su fundador. Funcionaba para quienes no podían acceder a la escolaridad normal o desertaban de las escuelas “exigentes”. Viendo sin prejuicios y a la distancia del tiempo, no importa que muchos se hayan reído,  de que ciudadanos  humildes hayan egresado  de esa escuela, la que tenía nombre  de zapatero, y no de “personajes ilustres”, de los que había una gran galería provincial.

Moisés nació en la parroquia Picaihua del cantón Ambato un 18 de febrero de 1912, en el hogar de don Manuel Sánchez y de doña Felicidad Sánchez. Redundando en su apellido, fue un hombre de gran talla, dueño de mucha energía y con vocación de maestro. Tengo su imagen cuando fue a visitarnos en la escuela primaria en Andignato. Hay una fotografía tomándose una copa con mi abuela, orgullosa de su nieto después del examen. Ahora entiendo que él debió haber sentido mucho apego a su solar natal porque legó para su tierra una “Monografía de Picaihua”, publicada en 40 páginas. En su portada está el escudo parroquial, seguramente diseñado por él.

Se inició en la carrera del magisterio hace exactamente 100 años, en 1920. Trabajó en las escuelas de San Bartolomé, Picaihua, y en la creada por él, la Juan Cajas. Después de trabajar en la escuela de Huachi Chico,  muchos recordarán sus largos años en la escuela “México” que se había fundado en 1932. Estando aquí, hizo un paréntesis de mejoramiento académico y se fue al normal “Juan Montalvo” a Quito, para regresar a su escuela, “de donde pasó a la primera Escuela Complementaria que hubo en el país” y que estuvo ubicada en Patate.

Su biógrafo de la Monografía de Picaihua ha anotado que salió de esta escuela como Inspector Escolar. Se fue a la provincia del Cañar, luego pasó a la de Cotopaxi, a la de Chimborazo, hasta que se reintegró a Tungurahua. Los políticos de su época también lo recordarán por su elocuente militancia en el Partido Liberal Radical, del que fue su presidente. Claro, sus ideas mal vistas en un peligroso educador de alto nivel fueron motivo para obligarlo a renunciar en 1944. No importaba, pues regresó  como Director de la escuela México, “donde permaneció 14 años, tiempo en el que se adquirió el local propio, la banda de guerra y abundante material didáctico y se celebró las Bodas de Plata del Plantel en debida forma. En el año 1960 retornó a la Inspección Escolar, ascendiendo a la Dirección Provincial de Educación en 1963.” Recordemos que Carlos Julio Arosemena fue depuesto por la Junta Militar un 12 de Julio de 1963. No resistió a la Junta Militar y se jubiló el 1 de octubre de 1964. Murió en 1977, un 2 de julio. A una escuelita de Chocaló del cantón Quero le pusieron su nombre.

En cuanto a la Monografía de Picaihua, los datos históricos de la creación de la parroquia por 1872 se respaldan en los respectivos documentos municipales y de la gobernación. La creación de esta  parroquia tuvo serios inconvenientes porque dejaba muy menguado el territorio de Totoras, y casi despoblada dicha territorialidad. Por ello hubo de reasignar territorios  de Huachi y La Matriz de Ambato. Una reproducción de estos documentos, bien vale la pena que lo tengan en cuenta las autoridades actuales de su Junta Parroquial, para conocimiento de las nuevas generaciones. (O)

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