Murió en la calle
El frío y la soledad lo acompañaron hasta el último soplo de vida. La noche del miércoles 12 de mayo, los policías encontraron el cuerpo sin vida de una persona que al parecer era indigente.
Acostado en la vereda en las calles Araujo y Fernández fue localizado. No hubo nadie quien lo reclame, tampoco quien lo llore.
El bombero Walter Cañar confirmó lo que se presentía. Había muerto y el personal de la Dinased, al mando del capitán Marco Salazar; y Criminalística realizaron el levantamiento del cadáver que fue trasladado hasta el Centro Forense, cuyo cuerpo permanecerá hasta que alguien lo reclame y puedan darle cristiana sepultura. (I)