No se salvaron de la purificación
Dos ciudadanos extranjeros que llegaron hasta Pilahuín para robar a una mujer de la zona, fueron retenidos y castigados por los comuneros. Posteriormente, fueron entregados a la policía.
Los sujetos se mostraban temerosos al ver la furia de los pobladores, quienes no soportan la inseguridad, por lo que aplicaron la purificación indígena.
Con ortiga y agua helada se dio paso al castigo en la plaza central de la zona. Luego de aplicada la decisión de los pobladores, los dos individuos fueron entregados a la Policía Nacional para que se inicie con la sanción.
Juan Tenelema, presidente del cabildo de Pucará Grande, indicó a la policía que dentro de su territorio se aplican las sanciones establecidas a quienes intenten perturbar la tranquilidad de la parroquia. (I)