Nuevo destino para la patria
Ningún ciudadano debe ignorar los momentos cruciales que vive el país, para esclarecer el tema, me remito a nuestra trayectoria republicana. Y, la historia ecuatoriana no registra un acontecimiento similar. Dos candidatos presidenciables en pugna electoral en un balotaje, debido a elecciones anticipadas, producto de la aplicación de la “muerte cruzada”, acaecida por primera vez en el Ecuador. Estamos asistiendo a una coyuntura histórica sui géneris, nos invita a un escogimiento entre dos candidatos de ideologías políticas diametralmente opuestas. Ante las horrendas circunstancias que está atravesando la patria.
Hoy a los ciudadanos ecuatorianos nos corresponde ubicarnos en un solo lado. Huir es evidencia de un anti patriotismo. Porque no se trata de algo personal ni sectario, sino del nuevo destino para el país, por lo tanto, como lo expresa el dicho popular vamos por “la ilusión o la desilusión”, que es la disyuntiva que ahora se presenta. Por sentido común tocaría escoger la primera. Entonces, es muy importante seleccionar lo bueno de las opciones y restarle lo peor y solamente voy a tomar tres preguntas pos debate. Mientras el un finalista pretende eliminar la tabla de consumo de drogas por ser nocivo para la juventud, la otra finalista defiende la tabla de consumo de drogas. En el tema de la dolarización, el un contendor estuvo abiertamente favorable a mantenerla tal como es la aspiración de todos los ecuatorianos. Mientras que la dama está de acuerdo con la desdolarización, propuesta realizada en el IX encuentro del grupo de Puebla como parte de la lucha geopolítica contra Estados Unidos. El uso de la reserva internacional, prohibido por la Ley, mientras el candidato manifiesta que el uso de la reserva podría tomársela como último recurso para enfrentar los embates y fenómenos catastróficos de la naturaleza, mientras que la dama propone “cogerse” para supuestamente realizar préstamos con la banca estatal y reactivar la economía, aún a costa de los tremendos desajustes y riesgos, vale discutirla a fondo mucho más si se trata de dinero ajeno.
Entonces es muy importante para aquellos que seguimos a los dos contendores por este corto tiempo, analizar las propuestas de los candidatos finalistas restarle lo malo, estamos todavía a tiempo. Meditemos con plena conciencia al tomar la decisión. El gobierno que viene es de transición, pero determinará una visión de alternancia democrática en las futuras elecciones ordinarias del 2025, elijamos de lo que pueda ilusionarnos que es mejor de lo que pueda venir en lo peor. De nosotros depende distinguir o diferenciar, desde luego justificados en experiencias con gobiernos anteriores. (O)