Pan de Pinllo, sabor de generaciones

Interculturalidad

Pinllo, una parroquia de Ambato, Tungurahua, no solo se distingue por su belleza natural, sino también por su riqueza gastronómica.  En el corazón de esta comunidad, el tradicional pan de Pinllo se ha convertido en un símbolo que atrae tanto a visitantes nacionales como internacionales, quienes buscan experimentar un pedazo de historia en cada bocado.

El Rincón de la Abuelita: Un Emprendimiento Familiar

El legado de este famoso pan es preservado con dedicación por Ricardo López e Isabel Bonilla, quienes han tomado las riendas de un emprendimiento llamado El Rincón de la Abuelita. 

Con más de 130 años de tradición, su receta familiar, transmitida de generación en generación, asegura que cada pieza de pan mantenga el sabor auténtico que ha conquistado paladares a lo largo del tiempo.

Ubicado en la intersección de las calles Convencional y La Nación, el establecimiento cuenta con un horno de leña que otorga al pan ese característico sabor ahumado y textura inigualable. Aquí, el pan es elaborado con una mezcla de manteca de chancho, harina de maíz y de trigo, respetando la receta original que ha perdurado a través de los años.

Variedad y sabor en cada bocado

En El Rincón de la Abuelita, los visitantes pueden disfrutar de tres variedades de productos: el injerto, el cachito de dulce y la empanada de queso con cebolla. Con precios que inician desde 25 centavos de dólar, estas delicias pueden acompañarse con la tradicional colada morada, una bebida típica que complementa a la perfección la experiencia culinaria.

Una historia que trasciende el tiempo

El pan de Ambato no es solo un alimento; es parte de la historia cultural de la región. Se remonta a las primeras épocas coloniales, cuando en 1790 el Dr. José Pérez de Calama, designado XX Obispo de la Diócesis de Quito, llegó a la ciudad. Este español, oriundo de Alberca en Extremadura, sentó las bases para la elaboración de un buen pan, insistiendo en que debía ser “bien amasado, bien fermentado y bien cocido”. Su legado incluyó instrucciones sobre la construcción de hornos, que debían ser de forma abovedada y fabricados con ladrillos.

Un icono cultural

La popularidad del pan de Pinllo ha crecido tanto que se ha convertido en un elemento icónico de la cultura local, mencionado en canciones que han dado la vuelta al mundo. La frase «A los tiempos, Pan de Pinllo» resuena en la memoria colectiva de quienes han disfrutado de su sabor, convirtiéndose en un símbolo de nostalgia y tradición.

En conclusión, el pan de Pinllo es mucho más que un simple alimento; es un legado cultural que Ricardo López e Isabel Bonilla continúan honrando en El Rincón de la Abuelita. Cada bocado es una invitación a viajar a través del tiempo, disfrutando de un sabor que ha perdurado durante más de un siglo. Sin duda, un tesoro gastronómico que merece ser descubierto y celebrado. (I)

Deja una respuesta