Pandemia pasó factura a nivel educativo

Ciudad

Los estudiantes que cursaron desde séptimos años de educación básica durante la pandemia, cuando la educación virtual era la norma, están enfrentando importantes dificultades en los exámenes de ingreso a las universidades. 

Estas dificultades se deben en gran medida a las falencias en habilidades académicas que se han vuelto evidentes en las evaluaciones recientes.

Carlos Zurita, director del Centro Preuniversitario Quality Up, comentó sobre la situación actual. “Estamos viendo un retroceso significativo en las habilidades de razonamiento y matemáticas básicas de estos estudiantes. Hay casos en los que los estudiantes no pueden realizar operaciones matemáticas simples, lo que refleja un problema más profundo con las habilidades adquiridas durante la pandemia”.

Zurita destacó que el impacto de la educación virtual en los años formativos ha sido notable, con muchos estudiantes mostrando deficiencias en áreas fundamentales. En respuesta a estos desafíos, Quality Up ha implementado un programa llamado “Sube Notas”, diseñado para abordar estas falencias y preparar a los estudiantes para los exámenes de ingreso a la universidad.

“El programa Sube Notas tiene dos objetivos principales: primero, cubrir las deficiencias académicas acumuladas durante la pandemia, y segundo, mejorar las calificaciones generales del colegio”, explicó Zurita. Esta iniciativa busca nivelar a los estudiantes que han tenido dificultades y garantizar que estén mejor preparados para enfrentar los exámenes de ingreso.

Zurita también destacó una estadística alarmante: cerca de 22.000 niños perdieron el año académico anterior debido a los desafíos educativos exacerbados por la pandemia. 

Además, para ingresar a dos de las universidades más prestigiosas, el proceso de selección considera la nota final del colegio como un 75 por ciento y el examen de ingreso en un 25 por ciento, lo que subraya la importancia de un rendimiento académico consistente.

Los programas de nivelación de Quality Up se ofrecen durante todo el año lectivo, pero experimentan una mayor demanda al final del primer trimestre, cuando los padres de familia reciben las libretas de calificaciones y buscan formas de mejorar el desempeño académico de sus hijos.

La situación actual pone de manifiesto la necesidad de una atención continua y especializada para los estudiantes afectados por la educación virtual, con el objetivo de asegurar que puedan alcanzar su máximo potencial académico y superar los desafíos que la pandemia ha dejado en su camino. (I)

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