Pato al Lodo y La Diablada / Luis Alfredo Silva
El primer día viernes del año nuevo, 2.020, visitamos la ciudad de Santiago de Píllaro,para degustar las comidas que prepara el restaurante típico, «Las Delicias de Pacha Mama», en especial, el plato emblemático, «El Pato al Lodo», y admirar la fiesta tradicional, «La Diablada Pillareña»,que se realiza entre los días 1 y 6 de enero, de cada año.
«El Pato al Lodo», es una comida ancestral, que preparaban los cocineros del Señorío Pansaleo, que habitaba los territorios de nuestra provincia; lo hacían con pato silvestre y lodo del páramo.Gracias a las investigaciones, del propietario del restaurante, se pudo rescatar la receta culinaria de nuestros aborígenes. Hoy se cocina, exclusivamente, en «Las Delicias de Pacha Mama» y se sirve acompañado de papas, con salsa de pepa de sambo, arroz, ensalada fresca y ají molido en piedra.
El restaurante típico, se encuentra al lado derecho de la carretera que conduce al cantón Patate, en el caserío denominado San Vicente de Quilibulo. Un gran aviso, pintado en la pared de una casa de planta baja, construída con materiales detugar, lo identifica.
Posteriormente,nos trasladamos a la ciudad, para apreciar la fiesta folklórica «La Diablada Pillareña». Se realiza en laa calles de la urbe mediante grupos, llamados partidas, procedentes de varios pueblos aledaños a la cabecera cantonal.
Los integrantes de las partidas bailan al ritmo de la alegre música nacional, que entona una banda de pueblo, que va en la mitad del grupo. Los personajes son payasos, capariches, guarichas; destacándose, los diablos.
Los diablos van vestidos con trajes de color rojo, algunos usan capa y llevan en sus manos animales disecados y un fuete. Usan una máscara terrorifica, con cuernos de toro o de borrego mocho, colmillos muy agudos y un colorido y alto cabezal; bailan con entusiasmo y ponen la alegría a la fiesta.
Existe también, una organizada exposición de artesanías pillareñas, que se presenta en una de las calles que rodean el parque central. Muestran personajes de «La Diablada» y máscaras, en pequeñas figuras; varios artículos elaborados en cuero entre otras atractivas artesanías.
Así realizamos un turismo gastronómico y cultural,en la dinámica ciuadad de Santiago de Píllaro. (O)