Polígonos de intervención en los negocios / John Tello Jara
Al realizar actividades empresariales en nuestra ciudad, debemos conocer las áreas correspondientes dentro de los polígonos de intervención para ver la idoneidad de cada zona.
Tiempo atrás recuerdo que unos amigos crearon una empresa artesanal de “granola” y se instalaron en la parroquia Santa Rosa (en su zona urbana) el negocio marchaba bien, tenían muchos pedidos, pero sin embargo para ampliar su empresa necesitaban la notificación sanitaria (registro sanitario) y un requisito era “tener el certificado del uso de suelo”, es decir, conocer si el sitio en el cual se instaló el taller, era apto o no para producir el producto.
Con un resultado negativo, no pudieron presentar el certificado en mención, tuvieron que desmontar el negocio, con el consiguiente gasto que implica el montaje de la empresa en otro sitio, con toda su infraestructura.
Si queremos construir conjuntos habitacionales y saber la cantidad de pisos que podemos edificar, debemos conocer el PUGS (plan de uso y gestión del suelo) y, no solo eso, también debemos comprender que existen zonas destinadas a la protección de laderas, zonas productivas, concesiones mineras, rellenos sanitarios, zonas industriales, etc.
Dentro del proyecto de inversión si bien es cierto que requerimos el estudio de la oferta, la demanda insatisfecha, los costos de producción, la competencia, la tecnología a utilizarse, los planes de financiamiento, etc.; debemos prioritariamente analizar la ubicación y localización de la empresa, para ver si es factible su montaje.
Conocer los retiros frontales, laterales, posteriores y la planificación urbana (calles, curvas de retorno, desplazamientos de eje) permite reducir riesgos de inversión y saber a ciencia cierta el número de pisos, así como el coeficiente de ocupación del suelo, para conocer el área del terreno que puede construirse y el tanto que queda libre, esto en construcción de edificaciones y en general conjuntos habitacionales.
En el ámbito de la producción agrícola, debemos estar al tanto de aquellos sectores que permiten sembrar, evitar llegar a la zona del páramo, así como ver los sectores de protección de cuerpos de agua y la vegetación natural. (O)