Populismo ha destruido la economía / Edison Narváez Z.
El experimento económico y político del siglo XXI denominado “Socialismo del Siglo XXI”, emprendió transformaciones en varios países como Venezuela, Argentina, Ecuador, y Bolivia; sin embargo esta novelería socialista se ha venido desmoronando fundamentalmente por la corrupción y la constante violación a los derechos mas fundamentales de los seres humanos. Este modelo de estado “revolucionario”, sustentado sobre un régimen caudillista, autoritario y populista ha generado el deterioro de los niveles de vida de la gente so pretexto de la intervención del estado en la economía.
Ciertamente este nefasto populismo ha sido tremendamente intervencionista, expandiendo el gasto publico con el objetivo de incentivar el crecimiento económico y mejorar la distribución del ingreso a favor de las clases desposeídas. ¡Pamplinas! lo único cierto es que han primado los intereses políticos sobre los intereses económicos de la sociedad e indudablemente aparecieron nuevos millonarios que ahora han huido como cucarachas llevándose la plata del pueblo.
Las experiencias socialistas has sido similares en América Latina, pues han emergido de los fracasos de las políticas liberales y se presentaron como salvadores de la patria ante un descontento social generalizado.
La Política Económica populista evidencia en primera instancia un crecimiento económico ficticio, pues la inflación y la demanda son controladas artificialmente, en virtud de que el populismo tiene un carácter netamente político, les importa un pepino el equilibrio macroeconómico y la productividad, atacando al sector privado bajo la farsa de defender los derechos de los trabajadores.
Que no nos vuelvan a sorprender estos famosos lideres populistas que obteniendo el poder desmantelan instituciones, generan constituciones a su conveniencia, restringen la libertad de los diferentes sectores y destruyen la economía. (O)