Productores vulnerables con ayuda

Ciudad

La empresa distribuidora de alimentos a las principales cadenas de supermercados a nivel nacional es Guadaproducts, quien en alianza estratégica con las 46 familias vulnerables que ayuda la Fundación Proyecto Salesiano, se han establecido nexos de comercialización del zucchini a precio justo. 

La primera cosecha será dentro de los próximos días. Lo que se espera es que el precio se mantenga todo el año que estarán en producción, explicó Kléver Sánchez, técnico de Proyectos de la Fundación Proyecto Salesiano.

Cada 15 días se siembra una parcela diferente, donde se involucran de dos a tres familias beneficiarias de este proyecto. Adicionalmente se preparan los terrenos para la quinta plantación de este producto. 

Existe optimismo por parte de las familias. Ya que se proyectan hacia el futuro y evitar pasar por el intermediario en la comercialización, acotó el técnico.

Además, explicó que el agricultor siempre está en condiciones de vulnerabilidad cuando no tiene apoyo, y recordó que en la actualidad, por ejemplo, a precio de uno y máximo dos dólares el  atado y coliflor (12 unidades), brócoli (12 unidades), en tanto que, el cartón de lechuga (entre 12 a 14 unidades) está a un dólar o dólar y medio, es decir, al productor le pagan por lechuga apenas 10 centavos de dólar, mientras que, al consumidor le cobran entre 50 centavos a un dólar la misma lechuga el intermediario.  

El saco de col (que lleva 40 unidades) está en apenas cuatro dólares, es decir, toda la ganancia es para el intermediario, añadió el técnico.

Es por estas circunstancias que la Fundación Proyecto Salesiano hizo el contacto y estableció de manera formal el convenio con la empresa Guadaproducts para que las familias ya no comercialicen sus productos a los comerciantes que los explotan, sino que lo hagan a la empresa que les pagará lo justo por un buen producto de calidad. 

La granja, dijo, el técnico posee cinco hectáreas que pueden ser destinadas a producción, pero por ser un proyecto piloto, se empezó por dos hectáreas. Al momento está una hectárea de la granja destinada a pastos y forraje para alimentar a las especies pecuarias (cuyes y chanchos). 

La integrante de la Asociación Mujeres Emprendedoras, Gloria Ashiqui, manifestó estar contenta por la oportunidad de poder comercializar sin pasar por el intermediario. Los productores están motivados. Están cumpliendo con los estándares de calidad, y el peso adecuado del producto.
A cambio se pide el precio justo, porque en el campo el trabajo es duro, y se labora sin considerar el temporal, pero todo vale la pena con la esperanza de cultivar este producto, acotó la mujer emprendedora. (I)

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