Turismo en Tungurahua al borde de la quiebra
Hace tres semanas se reunieron varios sectores de la sociedad con el presidente de la República, Lenín Moreno y se solicitó que se conforme el Comité de Salvamento Turístico y donde también integren tres ministerios y representantes del gremio turístico, pero nada se ha hecho y por eso se dio la marcha, sostuvo Paúl Pinto, presidente de la Cámara de Turismo de Tungurahua, ayer.
La situación es crítica por esa pandemia, y la liquidez de las empresas no sólo de Tungurahua sino del país, se terminaron. Se ofrecieron créditos, pero no ha podido acceder este sector. Esta es la industria más golpeada y declarada en riesgo, sostuvo el funcionario.
Se requiere incentivar el turismo interno, nacional e internacional. Se pide la exoneración del Impuesto del Valor Agregado (IVA) durante dos años para las personas que consuman productos turísticos a nivel nacional. Se necesitan recursos para la difusión turística; es decir, es imperioso que se restablezca el Fondo de Promoción Turística.
Hace algún tiempo se viene cobrando la tarifa ‘Eco Delta-ED’, donde las personas que adquieren su pasaje aéreo pagan 50 dólares. Al año se recauda en promedio 70 millones de dólares y no se sabe dónde está ese dinero.
Hay que combatir la informalidad en hospedaje (en plataformas de internet donde ofrecen el servicio sin pagar impuestos); así también, alimentos y bebidas. Se pide competir en igualdad de condiciones, porque el sector turístico paga impuestos, tasas, permisos de funcionamiento, IESS y más, mientras que, la informalidad no paga nada y nadie lo regula, añadió Paúl Pinto.
Diego Mosquera, presidente del Consorcio de Cámaras de la Producción de Tungurahua y presidente de la Cámara de Comercio de Ambato, quien respaldo la posición del sector turístico por considerar que este es uno de los más golpeados; a esto se suma el ‘manifiesto’ público ante la falta de atención del Gobierno por no acceder a la reactivación adecuada. (I)