Ruido ensordecedor / Editorial
El comentario ciudadano en la zona céntrica de la urbe ambateña radica en la molestia por el excesivo ruido de las plantas de energía afuera de los negocios; lastimosamente, la falta de luz está colapsando la dinámica comercial en Ambato y, ayer lunes, no fue la excepción.
A más del ruido, también se suma el fuerte olor de las plantas de energía que emanan dióxido de carbono, lo cual se concentra en diferentes industrias, con una inminente contaminación ambiental y perjuicios a la salud.
El exceso de ruido también genera problemas de concentración a los trabajadores, donde, oficinistas desarrollan más niveles de estrés por factores externos, donde la irritabilidad laboral aumenta por altos decibeles.
Ojalá que la situación energética en el país mejore para finales de octubre, ya que, la situación laboral para diversos comerciantes es insostenible y el desempleo en las calles aumenta cada día. (O)