Se habría quitado la vida por malas calificaciones
En Yatchil en la parroquia de San Andrés en Píllaro, una madre de familia no logra entender la muerte de uno de sus hijos. Apenas tenía 13 años de edad.
Comentó que tenía problemas escolares y su hermana manifestó que siempre pasaba jugando en línea. El último día antes de la muerte, la progenitora lo notó extraño e incluso no había querido desayunar.
Después se había ido al dormitorio y como no bajaba al almuerzo, la mamá acudió a llamarlo, pero la puerta estaba cerrada con llave. Forzó hasta que logró ingresar y lo observó que estaba sin vida. Al parecer se quitó la vida con una bufanda.
La familia lo bajó y lo trasladó a una casa de salud, pero los médicos solo notificaron la muerte. Los peritos de la Dinased, Criminalística y Fiscalía realizaron el levantamiento del cadáver la tarde del viernes 27. “Se está trabajando con las autoridades de salud, Gobernación y de Educación para educar en la prevención de los casos de suicidios”, expresó el capitán Marco Salazar, jefe de la Dinased en Tungurahua. (I)
