Seguridad, responsabilidad del Estado y sociedad
Junto a las autoridades de la Policía Nacional llegó Patricio Carrillo, ministro del Interior hasta Ambato para conocer las acciones y necesidades que se plantean para reforzar la seguridad en la provincia, ayer.
Esta fue la primera ciudad para llevar adelante el Primer Encuentro por la Seguridad, considerando que el Gobierno invertirá mil 200 millones de dólares para la seguridad nacional.
“Ahora nos corresponde dialogar y elaborar proyectos para la seguridad de los ecuatorianos. Vamos a trabajar con las autoridades locales y representantes de los organismos del Estado, ya que el problema de seguridad no es solo de los ciudadanos o instituciones sino del Estado. Todos los planes hay que aterrizarlos con metas y ser aplicados en la provincia”, comentó Carrillo.
Aclaró que es necesario avanzar con indicadores de paz positiva con una cultura social. “Queremos construir una política y una agenda de seguridad integral. Nos ha tocado responder donde el crecimiento estadístico es exponencial en inseguridad. Ambato está entre las ciudades más ordenadas y por ello queremos trabajar en prevención. La militarización tiene como objetivo contener la irracionalidad tanto en el tema carcelario como en provincias de la Costa”, comentó la autoridad nacional.
Ante lo señalado sobre el trabajo e interés que tienen las autoridades nacionales para erradicar la inseguridad, algunos ciudadanos no confían en el trabajo de los mismos, ya que a diario observan robos, asaltos a mano armada sin recibir respuesta inmediata de las unidades de control.
Moradores de la calle Juan B. Vela y Mera, desconocen sobre las actividades de seguridad que realizan las autoridades y prefieren “armarse” con palos, cámaras de vigilancia e incluso con cercos eléctricos para prevenir y ahuyentar a los ladrones, considerando que la zona es un punto crítico en el centro de la ciudad, ante los hechos delictivos y asesinatos registrados en el sector.
“Sí hemos visto a la Policía en las esquinas, pero no pasa nada. Eso no nos genera seguridad a nosotros como comerciantes, ya que los robos continúan, especialmente en la noche y madrugada”, explicó Fabián Hidalgo, propietario de local comercial en la avenida 12 de Noviembre y Mera.
Carrillo puntualizó que la seguridad no depende solo de un organismo, sino de una educación fortalecida, ya que no se puede llegar a erradicar totalmente los hechos violentos, porque es difícil hacer pensar de otra forma a quien quiere acabar con la vida de otra persona.
“El desempleo genera incivilidades con delitos menores masificados; por ello, se trabajará en una política de migración. Hay que revisar la política pública con la cooperación internacional. Las nuevas políticas definirán las estrategias que serán visibilizadas en cada ciudad”, explicó. (I)