Sentencia Histórica en Argentina / Editorial
La Vicepresidenta de Argentina Cristina Fernández de Kirchner ha sido sentenciada por un Tribunal Federal a seis años de prisión y prohibición de ejercer cargos públicos de por vida, al haber sido encontrada culpable del delito de defraudación al Estado y administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública por el monto de mil millones de dólares en asignaciones fraudulentas en concesiones viales mientras ejerció el cargo de Presidenta de la República entre los años 2007 y 2015.
Al igual que en su momento lo hicieran tanto el ex Presidente del Brasil Lula da Silva, como el ex presidente del Ecuador Rafael Correa, que también han sido sentenciados por la justicia de sus respectivos países por actos de corrupción durante sus mandatos, la Vicepresidenta Fernández se declara una perseguida por sus opositores políticos, y recurre a la teoría de la denominada lawfare que se traduce como la utilización abusiva o ilegal de las instancias judiciales para encarcelar o inhabilitar adversarios políticos.
Esta condena ha ahondado aún más la división entre los argentinos, los defensores a ultranza de su líder jamás aceptaran ninguna condena por corrupción, por más que existan abundantes e irrefutables pruebas. Además muchos de sus partidarios sostienen que si la Vicepresidenta efectivamente cometió actos de defraudación fue para hacer obras en beneficio del pueblo y sostener el proyecto político del kicherismo a favor de los más pobres.
SJH
