Sinfonía de tradiciones ancestrales
Varios son los caminos para conocer a las personas. Don Pepito, así lo llaman sus compañeros. Su accionar se ha profundizado en defensa de los derechos de las personas adultos mayores. La lucha ha sido constante y surge el interés de conocerlo no solo en la defensa por la vida digna sino su vida con el mundo ancestral.
José Alberto Garcés Escobar, es ambateño con formación en Ciencias Humanas y Religiosas, Liderazgo Interdisciplinario, Cibernética Social, Liturgia y Biblia, Capacitación en Fitoterapia, Aromaterapia y Reflexoterapia. Su protagonismo en la provincia es evidente siendo pilar en el Grupo de Interés Adultos Mayores del Parlamento Gente.
El lado humano de don Pepito está intacto y comparte sus escritos relacionados con la sabiduría ancestral, la Pacha Mama y la cosmovisión, “el buen Dios nos cuida y nos protege. El canto de los gallos anuncia este día especial. El respeto, la tolerancia, la bondad y la paz sean los regalos que comparte la madre tierra. La solidaridad, la responsabilidad, la equidad y la amistad son presentes que te trae el viento. La honestidad, la voluntad y la sensibilidad nos enseña a vencer las dificultades, la claridad que nos brinda el sol nos invita a dar gracias por el amor y la alegría que podemos compartir con quienes nos rodean, un abrazo siempre presente”.
Asegura que este año “ha sido muy agitado, pero rico en experiencia en esta celebración del Inti Raymi. Hemos participado con el personal del Centro de Salud de Quisapincha, Centro de Salud de Pasa, Centro de Salud N° 2 de la Simón Bolívar, Encuentro con Jóvenes del MECIT; en la parroquia Pilahuín, en el Parque de la Flores y en el Polideportivo en el Congreso del Movimiento Indígena”.
Su trayectoria también le deja experiencias con los jóvenes de las instituciones educativas; pues, “es alentador satisfacer sus inquietudes y preguntas, es muy gratificante. El Parque de las Flores, la Universidad Técnica en la Escuela de Enfermería en el marco de la casa abierta sobre Interculturalidad y Salud surgieron las vivencias”.
La vida se alegra y se llena con los conocimientos al compartir los saberes y sanaciones con plantas, limpias y explicando como mejorará la elaboración de maceraciones. De esta manera aportando con el saber de las plantas.
Mientras que, en los Centros de Salud se interactuó con el personal médico y de enfermería. El encuentro con el MECIT permitió revivir procesos de los años 80 y hoy los hijos están retomando su sensibilización frente a la cosmovisión andina y ancestral.
Y sigue con sus escritos, “la luna ha dado paso al sol, anunciando una nueva etapa de nuestra existencia, que el buen Dios que nos cuida y nos protege nos permita celebrar la vida”. (I)
