Sobrevivir, difícil tarea de emprendedores
Desde el 2020, el camino para los emprendedores ecuatorianos ha sido un desafío constante, enfrentando obstáculos como la pandemia, paros y crisis de seguridad que han impactado negativamente en su desarrollo.
Mélida Ávila, impulsora del emprendimiento familiar “Sabores de mi Tierra” en Quito, compartió su experiencia, describiendo años difíciles y expresando la esperanza de que las condiciones mejoren.
Este negocio, con cinco años de trayectoria, ha ganado la aceptación de la clientela a lo largo del tiempo. Sin embargo, la pandemia provocó una disminución del 50% en las ventas, y el año pasado representó un nuevo desafío. “Estamos resistiendo, deberíamos estar en un nivel mayor, pero nos hemos estancado. A pesar de tener certificación sanitaria y haber estado en perchas en supermercados, dejaron de comprarnos debido a convenios con otros países, dejando de consumir productos ecuatorianos”, comentó Ávila.
“Sabores de mi Tierra” se especializa en ofrecer salsas gourmet, como alternativas saludables y deliciosas. Mélida Ávila innova con salsas de chocho para personas intolerantes a la lactosa y utiliza la berenjena como proteína sustituta de la carne. Estas salsas están elaboradas con aceite de oliva y sal marina, destacando opciones como pesto de albahaca como chimichurri, picante, berenjenas asadas, cebolla caramelizada y salsa de frutos rojos.
El producto estrella, la sal marina con varios sabores y fruta deshidratada, ha conquistado paladares. En el marco de la Vitrina Comercial Hambatu 2024, «Sabores de mi Tierra» presenta un nuevo producto: vinagreta en diversas variedades, incluyendo manzana, fruta deshidratada y otros ingredientes. A pesar de los desafíos, la persistencia y la creatividad de emprendedores como Mélida Ávila demuestran que la resiliencia es clave para enfrentar los cambios en el mercado y ofrecer productos innovadores y deliciosos. (I)
