Verdades ocultas que salen a luz / Editorial
Durante el gobierno de la década “perdida”, muchos hechos de corrupción, de abusos, de autoritarismo y de atropellos a los derechos humanos se mantuvieron en total secreto para que el pueblo no pudiera conocer. Este morboso secretismo se institucionalizó en el país.
No obstante este sistemático ocultamiento, las múltiples irregularidades administrativas, los atracos, los abusos han llegado a destaparse. Los pativideos y la valija diplomática. El 30S fue una farsa montada para tapar la imprudencia de Correa en la Policía. La distorsión malévola de la deuda pública y la disminución de las pensiones jubilares. Y qué decir de los millonarios atracos a los fundos públicos. He ahí una mínima muestra.
El Presidente Moreno mantiene en su entorno íntimo a recalcitrantes correístas que buscan llevarle a errores para hacerle daño político. Las gestiones desplegadas en la frontera norte para controlar la violencia y el narcotráfico resultaron un fiasco para los familiares de los asesinados y secuestrados y de los ecuatorianos.
Los dos ministros del frente interno han renunciado con sensibilidad en una demostración de decencia y de dignidad. Los reemplazantes son personas honorables, capaces y alejadas de la influencia correísta. Ojalá el frente externo -que es parte de este fracaso- y que en su accionar no recoge el sentimiento de los ecuatorianos, sino intereses ideológicos sectarios, asuma una actitud digna como sus colegas.
El pueblo ecuatoriano sufre con sus hermanos venezolanos atormentados por privaciones y miseria, pero la cancillería admira y respalda al dictador. Qué contradicción. (O)