Vida sana con control

Ciudad

El Hospital General Ambato del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) se encuentra totalmente abastecido con más de seis mil pruebas para la detección de VIH, tanto de tercera como de cuarta generación. 

Johanna Villamarín, médico epidemiólogo del hospital y coordinadora de la Unidad de Atención Integral a Pacientes con VIH, informó que estas pruebas están disponibles para todos los pacientes que las requieran.

«Los pacientes pueden acercarse a esta unidad o a cualquier lugar del hospital, ya que todo el personal está capacitado para recibir y direccionar al paciente adecuadamente», señaló Villamarín.

El proceso de atención para pacientes con VIH en el hospital es integral. Inicialmente, el paciente es atendido por un médico internista, seguido de consultas con psicología, enfermería, consejería con ayuda social y atención farmacéutica. «Ayudamos al paciente en la realización de exámenes para diagnosticar enfermedades oportunistas y proceder a la implementación del tratamiento», explicó la coordinadora.

La unidad está conformada por un equipo multidisciplinario que incluye dos médicos internistas, una psicóloga, un médico nutricionista, un odontólogo, un ginecólogo, un pediatra, una trabajadora social y una enfermera encargada de la consejería. Este enfoque permite una atención completa y personalizada para cada paciente.

Villamarín enfatizó la importancia de realizar pruebas periódicas para la detección del VIH, especialmente en personas sexualmente activas. «El VIH es un virus de acción lenta, con un periodo de ventana que puede durar de cinco a diez años. Si me contagio hoy, puedo ser positivo después de cinco años, por eso recomendamos pruebas seguidas», afirmó.

El VIH debilita el sistema inmunológico, haciendo al paciente susceptible a enfermedades oportunistas como la tuberculosis. «Detectamos rápidamente a los pacientes para ofrecerles un tratamiento adecuado», agregó Villamarín.

El tratamiento antirretroviral, que consiste en tabletas diarias, es esencial para mantener la carga viral indetectable. «Una vez que tienen una carga viral no detectable, los pacientes ya no pueden transmitir el VIH», señaló Villamarín. «Tenemos pacientes con más de 20 años de tratamiento que están estables, saludables y activos».

El Hospital General Ambato del IESS continúa comprometido en ofrecer una atención de calidad y en mejorar la calidad de vida de los pacientes con VIH, garantizando un acceso fácil y rápido a las pruebas y tratamientos necesarios. (I)

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