Vientos de cambio / Ec. Mg. Diego Proaño PhD (c)
Con la posesión de Guillermo Lasso, como el Presidente de la República numero 47 y luego de 14 años de un modelo económico asistencialista, paternalista, populista y socialista de los dos últimos gobiernos, los ecuatorianos nos aprestamos a vivir con optimismo esta nueva etapa de la gestión pública con un corte mas republicano, de una economía más abierta, de libertad económica y libre iniciativa privada. A los tiempos se puede visualizar un entorno de gran expectativa por ver nuevas figuras en cargos directivos en ministerios, secretarias, subsecretarias, gobernaciones, coordinaciones, direcciones provinciales, etc, lamentablemente en los últimos años se ha visto a los mismos personajes de siempre rotando en cargos públicos, aun sin que tengan el perfil para ocupar un puesto, empero por ser parte de una agrupación política o por amistad, siempre están ocupando esos cargos.
Según la estructura de su gabinete, más los anuncios hechos estos últimos días, las primeras acciones como Presidente de la República se enmarcan a aligerar el proceso de vacunación, situación que no depende únicamente de su voluntad, puesto que son las farmacéuticas las que determinan los lotes de vacunas y las fechas de entrega, recordemos que, en campaña el Presidente Laso ofertó que en los 100 primeros días de su gobierno, vacunaran a 9 millones de personas en Ecuador. El segundo eje y simultaneo al anterior, es la reactivación económica del país, la cual además de decisiones, políticas públicas y acciones, dependen también del proceso de vacunación, porque al tener mayor inmunidad ante la COVID 19, automáticamente se aperturarán negocios, aforos, horarios y movilidad, por tanto habrá una mayor dinámica económica.
Asuntos urgentes como la continuidad del programa de crédito con el FMI, una reforma tributaria integral, que nos lleve a hacia una simplicidad y reducción de la elusión y evasión, también la reforma laboral que facilite modalidades de contrato con todos los beneficios de ley y abra mas oferta laboral, una reforma a la ley migratoria (movilidad humana), reforma a la ley de seguridad social porque como está al momento, pone en riesgo la sostenibilidad del sistema, una reingeniería al gasto público para optimizar de mejor manera, con mayor impacto en miles de beneficiarios, protección social a los sectores más necesitados, entre otros son las piedras que este momento tiene en la mochila pesada que le deja en régimen anterior. Entre los primeros anuncios, se ha dicho que habrá concesiones para la administración de refinerías, así como la venta de empresas públicas, otra pista nos ha dado el Ministro de Economía Simón Cueva, al parecer se revisará la base imponible para el pago del Impuesto a la Renta. La coyuntura nacional e internacional con que inicia el novel gobierno no debe ser desaprovechada para impulsar hacia adelante al país. Suerte al régimen. (O)