Viernes Santo / Editorial
La tradición católica recuerda hoy la crucifixión y muerte de nuestro señor Jesucristo, salvador del mundo quien murió por la humanidad y el perdón de los pecados, siendo este día de suma relevancia en términos de respeto y fe.
Este acto de valentía y de amor, demuestra que, nosotros como seres humanos, debemos mantener respeto hacia las leyes de Dios honrando su palabra y enseñanzas, ya que eso fue lo que predicó Jesús en su paso terrenal.
Este día debe ser de enseñanza colectiva religiosa, ya que, la fe debe prevalecer ante cualquier circunstancia adversa recordando que solo el creador es el que puede juzgarnos y llevarnos a la vida eterna.
Pedir perdón a diario, justamente, es lo que pide Dios para que nuestra alma se purifique y tenga esa paz interior bajo los ideales de lo que significa la Semana Santa, evocando la pasión, muerte y resurrección del hijo del hombre. (O)
