Profesores, supletorios, remediales, y de gracia/ Hernán Marcelo Guerrero
Estuve por unos días de vacaciones en la costa y en la sierra, y conversaba con algunos maestros de escuelas y colegios fiscales y me ha espantado oír como, según ellos, está la educación actual. Según algunos docentes traen consigo más horas de planificación preparación de exámenes, más aún a sabiendas de que los estudiantes durante el año lectivo no han alcanzado los aprendizajes mínimos para aprobar el curso. Esperan al finalizar el año lectivo pasar por todas las oportunidades y que aparezca el milagro de “pasar”, más que aprender. Según la Ley Orgánica de Educación Intercultural art. 12 “si un estudiante hubiera obtenido un puntaje promedio anual de 5 a 6,9 sobre 10, podrá rendir un examen supletorio acumulativo” Además la institución educativa debe ofrecer clases de refuerzo a estudiante antes de presentarse a rendir el examen supletorio debiendo obtener una calificación de 7 sobre 10.
Caso contrario tendrá una segunda oportunidad que corresponde al examen remedial, art. 213, “si un estudiante obtiene un puntaje anual de 5 sobre 10 como nota final o no aprobarse el examen supletorio” El trabajo del docente se incrementa en la elaboración de planes de actividades académica por cada estudiante que no aprueba el remedial. Este plan deberá cumplir en el hogar en conjunto con el padre y la madre de familia, antes que rinda el examen “Pregunta los padres de ahora obligarán a sus hijos”. Si no aprueba el examen remedial, sigue las oportunidades, existiendo un examen de gracia, según art. 214. Y en caso de reprobar, deberá repetir el curso requiriendo ayuda especializada académica o psicológica según el caso.
Los docentes han perdido hasta la autoridad dentro del aula, ya que no pueden dejar de año a ningún estudiante por mas vago que sea, pues si lo hacen, como maestros, deben justificar de mil maneras caso contrario son sometidos con sanciones administrativas. Y si el estudiante es resabiado, llega con aliento a licor o con substancias prohibidas” los docentes no pueden decir nada porque el estudiante dice que ya es acoso o ya le cogieron el diente” y amenazan con denunciarlos. oír los relatos de los educadores causa espanto, e indignación, en mi generación del Patrón “Bolívar”, cuando era Patrón “Bolívar”, los maestros eran nuestros segundos padres el profesor era autoridad, nos aconsejaban y nos obligaban a presentar a diario deberes, lecciones en frente de los compañeros y no en grupo con diapositivas como es ahora, los exámenes eran cosa seria, si no pasabas con un mínimo de 45 puntos te quedabas de año y no había vuelva luego, las leyes que se hicieron en la década pasada es la culpable para que hoy en día haya profesionales mediocres, estas leyes de educación y de los derechos de la niñez deberían reformarse para enderezar a los estudiantes, para que haya el respeto en doble vía y salgan mejores profesionales. En este nuevo año lectivo a los profesores les deseo suerte, y a los estudiantes no les deseo suerte si no que se pongan a estudiar, porque eso los llevará al conocimiento y al éxito. (O)